Turismo cercano a Hoelbrak

Eir Stegalkin, Norn Cazadora miembro de Filo del Destino

Eir Stegalkin (a.k.a La jefa machorra) es la persona con la que me hicieron contactar si quería saber cómo empezar todo. Norn guardabosques y cuyo nombre es conocido en mis tierras me lo dejó bien claro. Primero búscate un clan, y después aprende. Así que tras preguntar por ahí sobre algún clan majo, alguien en el Gran Albergue me comento sobre un Clan conocido por el nombre de El Clan de Los Lobos de Fuego, y cuando comenté que si aceptaban novatos con ganas de aprender y montar camorra, me avisaron de que vendría por mis tierras uno de sus representantes para reclutarme.

Pensé que precisamente debíamos vernos en Hoelbrak (a.k.a Jollbrans) ante el diente del Dragon Jormag que puede contemplarse allí, sería un sitio perfecto. Pero resultó que la representante ya había estado allí un montón de veces. Así que pocas cosas de ese tipo podrían impresionarla, vamos.

Así que acabamos recorriendo parte de la capital y de Las Colinas del Caminante (a.k.a Walking Dead) la jefa de clan guardabosques Nan y una servidora, mientras me mostraba algunos trucos, nombres, y me avisaba de que para avanzar vendría una guardiana humana de nombre Antea Sheppard (que por alguna razón me suena su nombre y apellido de algo) y un guardián humano de nombre Dastan Aldesaar que al parecer es tan novato como yo.

Poco después estábamos corriendo los tres por Las Colinas del Caminante como pollos sin cabeza con un sólo objetivo. Hacernos Voluntarios.

Si al final esto va a ser como una ONG.

El comienzo de la Gran Aventura…

Entonces el dragón despertó…

Mi pueblo, los Norn, siempre han tratado de alzarse ante las otras razas. Siempre hemos luchado por evitar el avance de los Charr en el norte, nunca hemos comprendido demasiado a los pequeños Asura, los Sylvari son demasiado jóvenes para nosotros, y los Humanos… demasiado bajos para ser tan parecidos a nosotros. En esas estábamos cuando Zhaitan despertó del sueño y arrasó con pueblos de todas las razas de Tyria, y convirtió a otros a su yugo. Hoy, todas las razas tratamos de luchar contra él, y contra el resto de dragones y razas que les ayudan.

No soy muy alta, al menos eso dicen los míos. Pero tengo el poder de la magia en mí, y debería poder ser capaz de convertirme en alguno de los animales a los cuales mi raza venera: el oso, el lobo, la pantera de las nieves o el cuervo. Mis antepasados adoraban al tótem del cuervo y a él estoy consagrada.

Nunca he ido más allá del Bosque Borealis, siendo niña. Y hasta ahora sólo había pisado la capital de los Norn un par de veces. Pero hasta allí he tenido que ir para buscar mi futuro y aprender todo lo que necesito como Elementalista.

Quizás aún no pueda realizar más de un conjuro con cada elemento, pero pienso practicar hasta conseguirlo. De momento lanzo esquirlas de fuego, un rayo en el aire, lanzo piedras sin tocar la tierra y esquirlas de hielo contra mis primeros rivales.

De momento, he viajado hasta Hoelbrak sola por primera vez cruzando el Puesto de Vigía Oriental y allí me han entregado una daga y un foco. Y ahora a buscarse la vida.